Por qué es un buen momento para viajar a Chaouen
Los planes al aire libre nos encantan a todos y ahora, a causa de la pandemia de coronavirus, mucho más. Dar paseos, disfrutar de la naturaleza, aprovechar el día… son algunas de las cosas que nos ha enseñado a valorar esta situación.
Hemos aprendido a viajar y a pasarlo bien de otra manera y eso es algo que nos llevamos para el día de mañana. Hemos aprendido a mantenernos seguros, a extremar las precauciones y a buscar alternativas de ocio que nos dejen disfrutar de nuestro tiempo libre a la vez que cuidamos de nosotros y de los demás.
Por esta razón te proponemos que sigas viajando y que esta vez lo hagas a Chaouen. Quien haya visitado esta ciudad al norte de la cordillera marroquí del Rif alguna vez sabrá que, precisamente, lo que abunda es el gentío y los turistas que la visitan día tras día por su belleza y encanto. De hecho, muchas de los comentarios que se suelen escuchar al oír hablar de Chaouen es, por supuesto, los paseos por sus encantadoras callejuelas de la medina azul. Pero también se critica las aglomeraciones de turistas por sus estrechas calles, plazas, tiendas, riads… y la turistificación que vive la ciudad hoy en día y contrasta con su espíritu de pequeño pueblo de montaña.
Sin embargo, Chaouen no ha cerrado sus puertas a causa de la pandemia y en la actualidad, debido a la reducción de la movilidad y transportes, el turismo en el país ha bajado de manera considerable a la espera de la recuperación del sector.
Esta puede ser una oportunidad perfecta para conocer Chaouen en su máximo esplendor lejos de masificaciones y ruidos. Déjate sorprender por la naturaleza de “la perla azul” y vive como nunca antes una experiencia inolvidable descubriendo rincones exclusivos para aquellos amantes que busquen autenticidad lejos de tópicos y postureo.
Es un buen momento para viajar a este pequeño pueblo a apenas dos horas en coche desde Tánger para disfrutar de la tranquilidad de su armonía, la amabilidad de sus gentes y ¡tomar unas fotos increíbles!