La plaza Jemaa el Fna o el corazón de la ciudad roja
En pleno corazón de Marrakech, donde se entrecruzan dos simbólicas calles como son Mousla Ismail con Mouassine, se abre un espacio de tregua que da un respido a las edificaciones de la Medina. Es la llamada plaza Jemaa el Fna en francés, o plaza de Yamaa el Fna, es una de las zonas imprescindibles en tu visita a la ciudad. Se encuentra a 302m del Zoco de Marrakech, a 447m de la mezquita de Koutoubia y a 741m de la Medersa Ben Youssef. La pura esencia marroquí se concentra en esta ágora que puede ser disfrutada desde dentro o con una perspectiva panorámica desde las teterías que la rodean en las terrazas.
Su característico ambiente dota a este espacio de una sensación diferente dependiendo de la hora del día a la que te acerques a este punto tan céntrico de Marrakech. Es el lugar de más tránsito en la ciudad tanto por el día como por la noche. Uno de los imprescindibles que no puedes pasar por alto es visitar la plaza Jemaa el Fna al atardecer; el cielo colorea el lugar y crea un paisaje donde los viandantes, el zoco y la vegetación están en perfecta sintonía.
SINÓNIMO DE ASAMBLEA O REUNIÓN
Que el nombre de la plaza tenga un significado apelando a un lugar de reunión quizá después de tu visita no es algo digno de sorpresa debido a lo cosmopolita que es esta plaza de Jemaa el Fna. Sin embargo, hay multitud de teorías que reflexionan acerca del origen que da nombre a esta concéntrica plaza de la Medina de Marrakech. Algunos opinan que el nombre de ŷâmiʻ al-fanâ significa “asamblea de aniquilación” porque, siglos atrás, este espacio había sido el lugar donde se decapitaban a los delincuentes, y acto seguido, se exhibían las cabezas de los mismos alrededor de la plaza, lo que, podría asemejarse a una reunión, de ahí la relación con esa “asamblea”.
Otras teorías apuntan al otro significado de la palabra ŷâmi, es decir, “mezquita”. Esto se debe a que, antiguamente, pudiera haberse alzado en la plaza Jemaa el Fna una mezquita, y este espacio correspondiera a la plaza que conocemos ahora.
ENTRE EL ZUMO DE NARANJA Y LA CHEBAKIA MARROQUÍ
La plaza, o también el meet point de la ciudad, tiene una estructura triangular rodeada por tiendas, puestos, restaurantes y edificios públicos donde turistas y nativos confluyen en un tránsito incesante. El zumo de naranja es uno de los productos que puedes comprar en Jemaa el Fna; su precio ronda los 4 dirhams que se corresponden a 40 céntimos de euro.
No obstante, no es lo único que encontrarás en esta plaza donde seguro que no te quedarás con hambre. Existen multitud de puestos de vendedores ambulantes para comprar atuendos típicos, lámparas, cachimbas… pero sobre todo abunda la gastronomía de la ciudad. En Jemaa el Fna hay de todo, desde los restaurantes más suculentos hasta los más modestos que no dejaran indiferente a nadie por el gran surtido de típicos sabores marroquíes de la zona. El contraste del dulce y salado, terminarán embaucándote y, seguramente, probando uno de los platos estrella de la cocina marroquí como la pastela de pollo, los tajines, el cuscús o los pinchos morunos.
Para terminar el almuerzo o la cena, probar un Selou marroquí pondrá la guinda a vuestra ruta. Son unos dulces típicos de pasta con frutos secos, azúcar y miel que, acompañados de una cachimba de menta en la misma plaza sentarán de maravilla.
Si comer en los puestos que llenan la plaza al anochecer en Jemaa el Fna resulta un problema, hay restaurantes a su alrededor que ofrecen una visita espectacular de la plaza marrakechí donde podrás comer o beber un té moruno a muy buen precio y disfrutando de sabores auténticos.
JEMAA EL FNA, UNA EXPERIENCIA INOLVIDABLE
Jemaa el Fna está considerada oficialmente desde 2008 como Patrimonio oral e Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO; este tipo de honoríficos reconocen conjuntos de creaciones basadas en la tradición de una comunidad cultural de un grupo.
Marrakech se convierte en uno de los platos fuertes de Marruecos; la antigua capital marroquí y africana es requisito indispensable para hacer de tu viaje una experiencia inolvidable concentrada en la plaza de Jemaa el Fna donde, empaparse de la cultura popular y gastronómica es, sin duda, la mejor opción.